3, 2, 1... ¡Cómo rescatar tus ojos del abismo de la presbicie!
¡Feliz domingo!
Esta es la semana de los ojos 👀.
Y no es casualidad.
Cada otoño es un nuevo peldaño que bajas en tu deterioro ocular.
La vuelta al trabajo frente a pantallas.
Menos exposición al sol
Más tiempo en espacios cerrados y mirando de cerca.
Más estrés…
Todo esto bien mezclado para crear un cóctel molotov perfecto para destruir tu visión.
Pero la buena noticia es que esto es evitable y, hasta cierto punto, reversible.
El miércoles hice un directo con Ainhoa de Federico, una especialista en visión natural que me ha ayudado a poner esta área de mi salud de nuevo en el centro.
Hoy te comparto tres ejercicios simples pero potentes para cuidar tus ojos, dos reflexiones que van a cambiar tu perspectiva sobre la salud visual, y una oportunidad única para transformar tu visión de forma gratuita.
3 ejercicios para fortalecer tu visión
Mirar de lejos con curiosidad, no con exigencia
La práctica es simple: sal al aire libre, especialmente al atardecer, y mira el horizonte con curiosidad. Las formas de las nubes, los colores del cielo, ese avión que pasa. No necesitas ver con nitidez absoluta, simplemente disfruta de la experiencia de mirar lejos.
Esta práctica parece obvia, pero Ainhoa me explicó algo fascinante: la actitud con la que miras es más importante que el ejercicio en sí.
Si miras de lejos como un examen (¿puedo ver esos detalles? ¿estoy mejorando?), activas tu sistema nervioso simpático y empeoras tu visión.
Pero si lo haces desde la curiosidad y el juego, activas el parasimpático y tu percepción mejora dramáticamente. El mismo ejercicio, resultados completamente opuestos dependiendo de tu actitud.
La técnica de los dos bolígrafos (coordinación binocular)
Este ejercicio es súper sencillo y efectivo. Solo necesitas dos bolígrafos de colores diferentes, o simplemente tus dedos.
Sostén uno a la altura del codo y otro con el brazo estirado. Elige cuál mirar (digamos el lejano) y mantén la atención en él. Sin mirar directamente el bolígrafo cercano, muévelo ligeramente y observa cómo ves dos bolígrafos cercanos en tu visión periférica.
Después cambia: mira el cercano y observa cómo el lejano se convierte en dos.
Esta práctica coordina ambos hemisferios cerebrales y es especialmente útil para estrabismo, ojo vago, o simplemente para mantener una binocularidad saludable.
El ejercicio del "pirata" (entrenamiento de ojo dominante)
Muchas personas tienen un ojo dominante que "manda" toda la información al cerebro, mientras el otro se vuelve perezoso.
El cerebro es brutalmente eficiente: si un ojo no ve tan bien, simplemente descarta esa información. Es lo que pasa con los niños con estrabismo que terminan viendo solo por un ojo, aunque el otro funcione perfectamente.
La práctica es simple pero requiere constancia. Durante 3 minutos cada mañana,
Tapa tu ojo perezoso (el que ve mal) con la mano o un parche, durante 1 minuto juega a lanzar una pelota pequeña al aire e intentar cogerla (verás que no es fácil).
Luego repite lo mismo tapando tu dominante (el que ve mejor) .
Luego repite lo mismo con los dos ojos destapados.
Importante: es muy importante no saltarse el último paso. El objetivo es equilibrar, no crear nuevos desequilibrios.
2 reflexiones que cambiarán tu perspectiva sobre la visión
Si fuera inevitable, ya estaríamos extintos como especie
Durante el COVID, en solo tres meses, el 57% de la población española vio declinar su visión. En adolescentes fue el 78%.
Tres meses no cambian tu genética, pero sí demuestran algo brutal: la pérdida de visión no es inevitable, es el resultado directo de nuestro estilo de vida.
Piénsalo: como especie hemos sobrevivido cazando, navegando, luchando. La visión era literalmente una cuestión de vida o muerte. ¿Crees que habríamos llegado hasta aquí si el 80% de nosotros necesitáramos gafas por defecto?
Lo que consideramos "normal" es simplemente el resultado de ser la primera generación que pasa más tiempo mirando pantallas que mirando el horizonte.
A los 98 años se puede recuperar la vista
Durante el directo, Ainhoa me contó de una alumna que a los 98 años empezó a hacer ejercicios de visión natural.
No solo recuperó la visión de la presbicia, sino que la mantuvo hasta los 103 años, cuando falleció.
Si alguien puede mejorar su visión a los 98 años, imagínate lo que puedes conseguir tú ahora.
1 oportunidad para mejorar tu visión de verdad
El lunes que viene, Ainhoa de Federico lanza su curso gratuito de visión natural.
Son cuatro lecciones que pueden transformar tu visión para siempre.
Te lo digo por experiencia. Después de mis primeras entrevistas con Ainhoa empecé a practicar lo que me contó y mi vista mejoró increíblemente.
El problema es que luego me olvidé del mantenimiento y el declive empezó de nuevo.
Por eso yo me apuntaré a este curso y así recuperaré este hábito tan saludable y que puede mejorar tanto nuestra calidad de vida.
Mi recomendación es que tú también te apuntes. Aunque sea por curiosidad. En el peor de los casos, aprenderás algo nuevo. En el mejor, podrías evitar años de dependencia de gafas o lentillas.
👉🏼 Apúntate gratis aquí: https://hotm.art/ainhoa25
¡Nos vemos la semana que viene!